Invierte en franquicias desde 5mil pesos con Play Business
Hasta ahora únicamente había tocado instrumentos de inversión prácticamente para principiantes, en su mayoría con tasas de interés fijas y con cantidades aseguradas por la ley, como el caso de los bancos y las SOFIPOS o incluso las inversiones en CETES, sin embargo, hay otro tipo de inversiones más aventuradas, con un poco más de riesgos pero que también prometen mayores beneficios, como en este caso: Franquicias.
Cuando tú escuchas “invertir en franquicias”, seguramente lo primero que te imaginas es tener que juntar mínimo 1 millón de pesos, conseguir un local, firmar contratos y por fin abrir tu negocio bajo una marca de un tercero. Y sí, probablemente también esa es una forma de inversión (que yo personalmente nunca he explorado), pero para inversionistas más pequeños, y que no quieren meterse en tantas broncas, también está la opción de hacerlo mediante la plataforma Play Business desde $5,000 pesos.
Sí, también sé que “invertir en una franquicia con $5,000 pesos” suena a una estafa, pero eso es porque no hemos hablado de la manera en la que trabaja.
Play Business se dedica a conseguir franquicias de todo tipo que necesiten capital para expandirse, ellos los investigan y, en conjunto con la franquicia publican en la plataforma un perfil de la empresa en donde indican sus últimos estados financieros, para qué quieren dinero de inversión, cuánto estiman pagar a los inversionistas en el mejor escenario, el escenario conservador y en el peor escenario. Una vez con todos los datos completos, se publica ese perfil de empresa, que ellos llaman Snapshot .
Una vez que éste se publica, las personas pueden leerlo públicamente y decidir si se compra un ticket de inversión.
Un ticket de inversión es comprar un pedacito de la franquicia, la cual será operada por un tercero pero que tú tendrás el beneficio de recibir dinero por ello de manera proporcional a lo que hayas adquirido en manera de regalías durante toda la vida de la empresa en la que inviertes.
Por poner un ejemplo práctico. Actualmente Junghanns Agua de Mesa está levantando inversión. Ellos piden mínimo una cantidad de 5 millones de pesos para crear 11 nuevas rutas para llevar garrafones de agua en la ciudad de Querétaro. Ellos tienen un plazo estimado de 20 días para juntar la cantidad mínima de dinero, así que se hace público su Snapshot y gente como tú y como yo podemos comprar un ticket de inversión, el cual en este caso está incluso dividido en 2 pagos.
Al comprar un ticket de inversión, lo que se hace es básicamente adquirir el compromiso de compra si es que la empresa llega a la cantidad mínima en el plazo establecido, en caso de que la empresa no llegue a la cantidad, lo que sucederá es que será una campaña fallida y nunca tendremos que pagar nuestro ticket de inversión… En otras palabras: se cancela todo.
En el caso de que se llegue a la meta de inversión (lo cual por lo regular sucede), nos enviarán un correo electrónico con los datos para hacer el pago de nuestro ticket de inversión en franquicia, y una vez terminado de pagar nos volvemos oficialmente propietarios de un pedacito de una franquicia, la cual en el mejor de los casos nos estará pagando regalías (un porcentaje de sus ventas totales) por el resto de la vida de la franquicia como tal. Es decir, si la franquicia quiebra, pues nosotros quebramos con ella, pero si la franquicia vive 100 años, entonces nosotros estaremos recibiendo regalías durante 100 años. Ojo, por lo regular en lo que se invierte es únicamente en ciertos puntos de venta de la marca, siguiendo con el ejemplo de Junghanns, se invierte en su planta de Querétaro y las regalías van sobre las ganancias de la planta de Querétaro. Es como invertir en un o unos ciertos OXXOs, no en todos los que hay en la república.
Al momento de escribir esto, la única compañía que está recibiendo inversión es Junghanns, pero constantemente están llegando nuevas oportunidades de inversión. Recuerda armarte de tu propio criterio e invertir únicamente en las que le ves futuro, ya que tu dinero puede irse a la quiebra con una mala decisión.